Saboteado (o eso creo)

Este post tendría que ser para celebrar mis cien posts en este espacio, pero por desgracia no lo es. Ultimamente, y sinceramente no lo se, noto que la gente de mi alrededor se aleja por un motivo que aún no consigo encontrar. Y no es sólo una persona, son unas cuantas. Tengo que averiguar quien es el que me está atacando en la sombra, poniendome, no se de que manera, en contra de otras personas, y haciendome la vida imposible.

Un saludo a todos los que habéis continuado leyendo este blog, que la verdad es que en los últimos posts se nota que sois menos, y si alguien habla por mi diciendo cosas malas, que sepáis que no soy yo. A los que por algún motivo os sentís contrariados por algo que haya dicho, aunque no haya sido yo, os pido disculpas.

Quizá vuelva, quizá no. Eso lo sabré cuando consiga averiguar el alcance del sabotaje.

Un placer!

Mariposa Tecknicolor, o como el tiempo pasa sin darnos cuenta.

Llevo años escuchando esta canción, aunque siempre en versiones, como la original, algo más ritmica. He elegido esta porque, el punto íntimo, y algo melancólico que inspira el piano, más aún en unas manos expertas como las del gran Fito Paez, le dan un aire especial, un aire que no le da cuando la interpreta de forma ritmica.

El hecho es que, la canción realmente me gusta porque te dice lo rápido que pasa el tiempo, de cómo al final todos los buenos recuerdos perduran, que todo lo malo al final se supera y siempre miras atrás con nostalgia, pero no con rencor ni con enfado, y que por supuesto, los que quedan en tu memoria son los que valen, y no más.

El otro día, la escuché en la radio, y me sentí realmente bien, a pesar de tener las preocupaciones que tengo, y de los momentos tristes que he pasado ultimamente.

Ya sabéis que siempre una buena canción, y un buen intérprete son capaces de levantarte el espíritu.

Salud, dinero y amor para todos!!!!

Terremoto.

De las miles de imágenes que han surgido a partir del terremoto del pasado Viernes, una de las imágenes que más me ha llamado la atención ha sido esta. Nuestro emblema, visto así, duele. Duele el alma, que es el tesoro más preciado que tiene Chile. El corazón de los chilenos, reflejado en el pabellón patrio, ha sentido un pequeño infarto. Pero saldremos de esta, si ayudamos los que estamos fuera, y si se mantiene el optimismo de los que están dentro.

Porque Chile, como esta bandera, se ha roto, se ha ensuciado, pero no se ha destruido.

Viva Chile!!!!